La irretroactividad de las leyes significa que, por regla general, las leyes comienzan a aplicarse desde el momento de su promulgación hacia el futuro, por lo que no generan efecto hacia atrás en el tiempo. Sin embargo, en Derecho Penal existe el principio de retroactividad de la ley más favorable, lo que significa que, cuando se dicta una ley más favorable para las personas que cometen delitos, entonces se aplica también hacia el pasado. En cambio, las que no son más favorables (por ejemplo, las que aumentan las penas) solo se aplican hacia el futuro.
Por ejemplo, si se decide bajar la pena de homicidio de 10 a 5 años de cárcel, entonces todas las condenas se rebajan a 5 años. Otro ejemplo: Si el límite de velocidad es 100 Km/h y te multan por andar a 120 Km/h, y luego se dicta una ley que aumenta el límite de velocidad, entonces ya no te pueden cobrar la multa. Otro ejemplo: Si alguien estaba cumpliendo una condena por consumir marihuana y luego se despenaliza el consumo, entonces queda libre.